Os propongo lo siguiente: Es muy fácil de hacer: tan sólo hace falta un diodo emisor de luz, un globo, un par de cables y unas pilas. Se monta todo dentro del globo, se llena de agua y al congelador. Después de unas horas, se quita el globo, se conectan las pilas y el resultado es esta refrescante bombilla de hielo perfecta para enfriar las copas o para refrescarse las manos en verano.
P.d Yo aún no lo he hecho pero en el video se ve que se puede hacer perfectamente. Ah y mucho Sevilla por cierto. Toca Arrebato.
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